El dulce camino al IM.

Ayer pase la barrera psicológica de nadar 3000 metros de crol, eso si en un paupérrimo tiempo de 1:35´, tendremos que hacer ejercicios de velocidad para bajar este crono.
Mientras nadaba, hacía lo que mejor sabemos hacer los triatletas de largo aliento, ....pensar, pensar y pensar; pensaba en la familia, mis queridos hijos, mi esposa, mis padres; pensaba en los entrenos , en los tiempos, calculando distancias , programando el próximo entreno, cuidando de no pasarnos de la raya pero que no falte intensidad, apretando un poco, aflojando otro poco, es un vaivén de sensaciones, mezcla de agotamiento y orgullo lo que nos lleva a dar cada vez un poco mas.
Hace tan solo un año que deje de ser corredor y me transforme en triatleta, llevo ya tres olímpicos, un corto, un Half y me gusta.
Este es nuestro dulce camino, largo, cansino, con sabor a sudor, donde llega el final del día y nos recostamos a la almohada y nos decimos tarea cumplida, otro peldaño que nos llevara a nuestra ansiada meta.