viernes, 27 de mayo de 2011

Periostitis Tibial





La periostitis es una lesión que se caracteriza por la inflamación dolorosa de la cara anterior de la pierna. La periostitis tibial se presenta con dolor en la “caña de la pierna”, esto es en el tercio inferior de la pierna, pero puede extenderse más arriba, casi hasta la rodilla.

Un síndrome importante en los atletas, sobre todo en corredores de medio fondo y fondo, es la Periostitis Tibial, denominada: shin splint, tibia dolorosa, tibia rugosa, síndrome de estrés medial de la tibia (MTS), periostosis tibial, etc. terminologías variadas todas ellas que vienen a decir que la tibia o tibias duelen. Es una afectación común en los atletas y saltadores. Suele originarse en el periodo que va del entrenamiento en campo a través, al que se practica en pista en corredores de medio fondo y fondo, cuando se inician las series de tipos interval-training o similares.



Un dolor, inflamación o quemazón cuando estamos corriendo en la cara antero-interna de la pierna, en la tibia, en la “espinilla”, puede ser el síntoma de una PERIOSTITIS TIBIAL, patología típica en el fondista, sobretodo en entrenamientos de distancias que requieran muchas horas, como medias maratones y maratones, aunque también podemos verla en corredores de menos distancia, dado que la tibia es una zona muy solicitada en el ejercicio de correr



La PERIOSTITIS, es una inflamación aguda o crónica del PERIOSTIO (peri = alrededor, y osteo = hueso), que es una membrana fibrovascular que rodea las piezas óseas, recubre los huesos, y en especialmente a la tibia, por su superficie externa excepto en lugares de inserción de ligamentos, tendones, y superficies articulares (la superficie externa del hueso a nivel de las articulaciones está cubierta por cartílago hialino, llamado cartílago articular), confundiéndose con las terminaciones de los tendones sobre el hueso.



El periostio sirve de lecho de sostén para los vasos sanguíneos y las terminaciones nerviosas que van al hueso (siendo por ello muy sensible) y para la fijación de los tendones y ligamentos (es muy resistente).



Podemos decir, que el PERIOSTIO es la vaina fibrosa que cubre los huesos y que contiene vasos sanguíneos y nervios que nutren y le dan sensibilidad a los mismos. A esta capa se pegan los músculos, como en el caso de la Tibia: el gemelo, soleo, tibial posterior, flexor de los dedos, tibial anterior, que usamos en la práctica del ejercicio de correr, encima de ella tenemos una capa de grasa y por último, la piel. En concreto, el dolor es el resultado de la tracción que ejercen los músculos que se unen a la tibia sobre ella.



La PERIOSTITIS TIBIAL es el nombre genérico que se le da a la irritación inflamatoria de la membrana externa de la TIBIA.



Cuando la tibia nos “quema” la CAUSA de la PERIOSTITIS TIBIAL puede ser anatómica, aunque también puede estar unida a la intensidad de la práctica del entrenamiento, en el corredor, y a los terrenos sobre los que se practica, (sobre superficies planas o inclinadas), utilizar calzado de mala calidad o cuando el grupo muscular gemelo-sóleo y el tibial anterior trabajan de una manera desbalanceada.



Como una quemazón, este dolor a nivel de la tibia que se nos presenta mientras estamos corriendo y situado en la cara antero interna de la tibia, con frecuencia (un 50% de los casos) afecta a las dos piernas. La palpación de la zona es dolorosa y el dolor puede sobrevenir mientras corremos.



Algunos autores la describen como el síndrome de los corredores principiantes, ya que aparece por entrenar con calzados inadecuados, terrenos muy duros, o problemas biomecánicos que solo se detectan cuando uno empieza una actividad como el correr o tras el inicio de un programa de entrenamiento, después de un largo periodo de inactividad.



Las pequeñas anormalidades anatómicas y biomecánicas que carecen de significación al andar pueden provocar la aparición de lesiones mientras se entrena.



El mecanismo de la carrera consiste en una secuencia compuesta por dos fases: fase de apoyo y fase de elevación del pie en el aire (sin apoyo). Al correr, los pies “colisionan” contra el suelo unas 500-1250 veces por kilómetro 850 a 70 veces por minuto por cada pie, con una fuerza de dos a cuatro veces el peso corporal (dependiendo del terreno y del peso del individuo). El impacto queda absorbido por el calzado o bien se transmite directamente a las piernas y a la espalda.



MECANISMOS RESPONSABLES DE LA INFLAMACIÓN DEL PERIOSTIO:



1. Las vibraciones causadas por los entrenamientos repetitivos, por el impacto del pie en el suelo, sobre terrenos duros y a veces coincidiendo con la utilización de zapatillas inadecuadas o demasiado gastadas.



2. Las tracciones excesivas sobre las zonas de inserción de los músculos sobre el periostio, teniendo como origen las rigideces musculares o los apoyos incorrectos.



3. La excesiva rotación de la cadera, una torsión tibial externa aumentada, la hiperpronación o una eversión exagerada del talón (durante la fase de apoyo plantar), valgo del retropié.



4. Los traumatismos repetitivos directamente sobre el periostio en la cara anterior de la tibia (botas de esquí o de patinar, golpes directos como en el fútbol), aunque esta última causa no suele ser frecuente en fondistas.



5. El exceso de entrenamiento, rodajes sobre superficies demasiado duras, demasiadas cuestas y horas por terrenos irregulares, pueden desembocar en una periostitis tibial. No parar cuando existe dolor pensando que ya se pasará. Falta de estiramientos.



6. Calzados inadecuados poca amortiguación o demasiado duro, con demasiado uso y gastados.



7. Deficiencias Biomecánicas:



Corredores que cargan con la punta del pie



Atletas pronadores



Pies planos


Fuente:Acondicinamiento Fisico Integral

2 comentarios:

  1. Cojear por una periostitis tibial fue la antesala de mi larga pero parece que recuperada tendinitis rotuliana. Gran artículo, como siempre. Saludos desde Cartagena

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  2. Hola usualmente cuando corro los 20 minutos primeros me duele la parte muscular externa de las "espinillas" ó de la tibia y el dolor es como una quemazón ... me impide concentrarme y poder avanzar en mis entrenos.
    He retomado el trote después de meses y lo hago en superficies duras como asfalto pero uso zapatillas neutras New Balance 890.
    Según tu experiencia que debo hacer para superar esta molestia y como tratarla???
    Saludos

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