jueves, 15 de septiembre de 2011

Un Triatleta conocido por el comercial de una bebida en nuestro medio nos da una lección.


El triatleta belga, 6º en Hawaii en 2001, sufrió un accidente con su bici en Lanzarote en 2002 y quedó parapléjico. Ese mismo año volvió a competir en Kona y en 2006 se proclamó campeón del mundo


Era triatleta antes de su accidente y sigue siendo triatleta tras  quedar parapléjico. Es Mark Herremans y es también un ejemplo de  superación. El sueño de este deportista belga era convertirse en el  atleta total. Estaba en el camino. Había encontrado en el triatlón la  disciplina perfecta. Su sexto puesto en el Ironman de Hawai, considerada una de las carreras más duras del mundo, en el año 2001 y con 28 años,  auguraba el mejor de los futuros. Pero le llegó este segundo que cambia  la vida para siempre. Fue el 28 de enero del 2002 cuando una caída en  bicicleta en la isla de Lanzarote acabó con la ilusión de su vida. Sus  piernas dejaron de moverse. Las vértebras D5 y D6 se habían lesionado.


Pero este fornido atleta belga supo darle la vuelta a su desgracia. El  hospital se convirtió en su casa pero él lo reconvirtió en su gimnasio.  Empezó a trabajar duro. No se rindió. “No se rindió jamás”, dice alto y  claro. No quiso que nadie sintiera pena por haber sustituido sus piernas por una silla de ruedas. Su cuerpo respondió y fue tal su empeño que  tan solo seis meses después, estaba en la línea de salida de Hawai. Esta vez en categoría de discapacitados.

En 2004 logró la tercera  plaza, el año siguiente fue segundo y en 2006 convirtió su sueño en  realidad: Campeón. “La vida te da estos contrastes. Yo conseguí en una  silla de ruedas lo que no pude lograr antes: ganar el Ironman de Hawai”, explica con una sonrisa. Pero el belga tiene un objetivo claro en su  vida: “Caminar de nuevo. Estoy trabajando duro y creo que un día lo  conseguiré. Superman (c) demostró cómo se podía caminar.  Trazó el camino. En Bélgica tenemos un centro donde Reeve enseñó cómo  alcanzar los sueños”





3 comentarios:

  1. Herremans es mi Dios en la tierra del triatlón.
    Un ejemplo en todos los sentidos.
    Coincidí con el en 2 Lanzarotes, nos animaba un año
    desde sus muletas, nos ganaba a casi todos al año siguiente
    con su fuerza y tesón.
    Un ejemplo sin duda.
    Gran ejemplo, gran referencia, gran entrada.
    Saludos

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  2. No conocia esta historia, como otras muchas.
    Te agradezco esta entrada, por hacerme conocer este testimonio de superación personal.
    Viendo estas cosas, pienso que deberíamos dar gracias por tener cosas sencillas, que los demás a veces no tienen, como la posibilidad de pasear.
    Un saludo y gracias.

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  3. la verdad q yo hace un tiempo q tuve un accidente en el cual quede en silla de ruedas con una lecion medular y a travez de la propaganda me puse a buscar. la verdad q es un ejemplo, me gustaria que todos tubieran las mismas ganas y fuerza para seguir adelante. es realmente impresionable y reconfortante saber q se puede a pesar de las limitaciones.
    desde uruguay saluda Maxi

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